A las que conoczco y a las que jamás ví.
A las que entregaron su vida a la familia y al hogar. Las que crian hijos sin replegar el ramaje de su ser y las que olvidan ser por criar hijos. Las que son cabeza, tronco y extremedidades en la vida de los suyos y las que orgullosas
se sostienen de un compañero. Las madres serias que con una mueca solucionan y las abuelas dulces que con una caricia y una galleta curan cualquier dolor.
Las enfermeras, las doctoras, las escritoras, las pintoras, las que hacen arte, las que cocinan, las que cuidan niños. Las que trabajan como obreras. Las que limpian hogares ajenos. Las que nunca fueron madres pero si compañeras, hermanas, amigas... Las que entienden el significado de la amistad. Las que luchan por verse mejor y a las que eso realmente no les interesa.
Las que cuidan su jardin y las que pelean guerras. Las que están trabajando en las fabricas. Las que hicieron historia y las que son parte de ella. Las que opinan y a las que las circusntancias se lo prohiben. La que manifiestan y la que son encerradas en si mismas, sin derecho a la palabra. Las emancipadas y las postradas. Las que sueñan con la libertad y las que la viven.
A las madres, las hermanas, las hijas, las sobrinas, las tías, las abuelas... Las que viven y las que ya son un recuerdo.
A las amigas, todas ellas fundamentales en el presente de quien cuenta con ellas y arquitectas de ese futuro .
A toda y cada una de las mujeres de este mundo que honran su género, desde sus creencias, su posición política, sus ideas y su estilo. A todas ellas, sin que ninguna me quede fuera: Feliz día de la mujer.
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